Como es tradición en la provincia de Herrera, cientos de jóvenes cambian la fiesta del Carnaval y prefieren pasar loa cuatro días en un ambiente de paz y recogimiento.
Se trata de los retiros espirituales que se celebran principalmente en la comunidad de El Ciruelo, en Pesé, así como en el distrito de Los Pozos, donde más de 400 jóvenes se reunieron en busca de una experiencia distinta.
Mientras que en muchos sitios la fiesta y el desenfreno es el detonante, en estos sitios los jóvenes en compañía de sus cuidadores y guías, participan de actividades deportivas, animaciones, contacto con la naturaleza y encuentro con Dios.
Sus organizadores indicaron que en estos retiros los jóvenes duermen en campamentos, disfrutan al aire libre, pero también reciben enseñanzas y vivencias, alaban a Dios y oran.
“Esto no me hace diferente, ni me hace mejor que otros. Solamente que prefiero esto a estar en un ambiente lleno de malos ejemplos”, indicó Lorena, una joven de 17 años de Chitré.
Los retiros son organizados por diferentes parroquias y se requiere de una gran logística para la alimentación de los jóvenes y su cuidado.
Salud al día...
Para ello, equipos del Ministerio de Salud visitaron los sitios donde se dan los retiros antes de la llegada de los jóvenes para evitar la presencia de mosquitos y roedores transmisores de enfermedades.
Adriana Ávila, del área de Control de Alimentos, indicó que también se visitan las cocinas de los retiros a fin de orientar a quienes manipulan los alimentos y evitar así enfermedades gastrointestinales.